miércoles, 3 de agosto de 2022

PROBIOTICOS: ALIADOS DE NUESTRA SALUD INTESTINAL E INMUNITARIA

 Una dieta saludable constituye un factor clave en la salud de cualquier persona. Es importante tomar consciencia de nuestra forma de alimentarnos, y profundizar acerca de los distintos alimentos disponibles, con el fin de realizar mejores elecciones. 

Seguramente alguna vez escuchaste hablar sobre los probióticos, los cuales han ganado mucha popularidad por el impacto positivo que tienen en nuestra salud intestinal. Ahora bien: ¿De qué hablamos cuando hablamos de probióticos?; ¿Cuáles son sus beneficios?; ¿Qué funciones tienen?; ¿En qué alimentos los podemos encontrar?  La idea de este artículo es poder responder a todos estos interrogantes.



Para empezar, es importante conocer el concepto de microbiota. Ésta se define como un conjunto de microorganismos (bacterias, virus y hongos) que habitan en nuestro intestino, y también se encuentran en la piel y otras superficies. Nuestra microbiota actúa como defensa del organismo frente a bacterias, virus o enfermedades. También asegura el correcto funcionamiento de nuestro sistema digestivo y colabora en la producción de vitaminas y la correcta absorción de minerales, es por esto que resulta súper importante nutrirla y cuidarla.  La microbiota puede verse afectada por el tipo de alimentación, el estrés, algunas enfermedades y/o consumo de medicamentos, generándose así una pérdida en el equilibrio de la misma, produciendo un aumento de los agentes patógenos sobre los benéficos, y esto conlleva a las siguientes consecuencias: aumento de la respuesta inflamatoria, malestar, alteraciones en el tránsito intestinal, entre otras.

¿Qué papel juegan los probióticos?

Los probióticos se definen como  microorganismos vivos que al ser ingeridos en las cantidades adecuadas, pueden aportar beneficios para la salud de quien los consume.  Los probióticos más comunes son las bacterias lácticas pertenecientes a los géneros Lactobacillus y Bifidobacterium, dentro de éstas las tres especies más utilizadas son Lactobacillus Casei, Lactobacillus Acidophilus y  Bifidobacterium spp.  Los beneficios producidos por éstos varían dentro del mismo género y especie, sin embargo en términos generales los estudios apuntan a que su consumo regular y en cantidad suficiente ayuda a regenerar y/o mantener el equilibrio de la microbiota, mejorando de esta forma la salud intestinal y también tienen un efecto benéfico sobre el sistema inmune. 

Ahora que ya sabemos sus funciones, y que es seguro y recomendable para la población sana adulta incluirlos en la alimentación diaria ¿Cómo los incorporamos de forma natural? Además de yogures, leches fermentadas y quesos, alimentos más conocidos como vehículo de probióticos, también se encuentran en el chucrut, el kéfir de agua o de leche, el kimchi, la kombucha, el miso y el tempeh. Es importante que el consumo de probióticos sea parte de una alimentación saludable adecuada en cantidad, calidad, armónica y variada. No existe un límite máximo de consumo de los mismos, ni tampoco una dosis especifica recomendada, si se sugiere que su consumo sea diario y se incorpore de forma gradual.

A continuación, te dejamos una receta de kéfir de agua, para que puedas hacerlo en tu casa y empezar a incorporar este tipo de productos a tu alimentación, cuidando la higiene de manos y superficies y utensilios utilizados en la preparación para disminuir el riesgo de contaminación.











KEFIR DE AGUA

INGREDIENTES Y UTENSILIOS

  • ·         1 FRASCO DE LITRO Y MEDIO (VIDRIO O PLASTICO, BOCA ANCHA)
  • ·         4 CUCHARADAS DE NOÓDULOS DE KEFIR DE AGUA
  • ·         5 CUCHARADAS DE AZÚCAR MASCABO
  • ·         1 LIMÓN
  • ·         2 DÁTILES, PASAS DE UVA O HIGOS SECOS (TODOS SIRVEN)
  • ·         1 LITRO DE AGUA FILTRADA
  • ·        1 BOLSA DE LAS QUE SE UTILIZAN PARA REALIZAR LAS LECHES VEGETALES O UNA GASA
  • ·         1 CUCHARA DE MADERA O PLASTICO
  • ·         COLADOR PLASTICO
  • ·         EMBUDO y JARRA o BOTELLA DE VIDRIO

PROCEDIMIENTO

  • 1.       INCORPORAR LOS NODULOS DE KEFIR (REGALADO, ALGUN AMIGO SEGURO TIENE, O SE CONSIGUEN EN DIETETICAS) EN UN BOLSA O GASA, CERRARLA E INTRODUCIRLA EN EL FRASCO
  • 2.       SUMAR ½ LIMÓN EXPRIMIDO, EL AZÚCAR Y LOS DÁTILES PICADOS
  • 3.       AGREGAR UN LITRO DE AGUA FILTRADA Y REVOLVER CON CUCHARA DE MADERA O DE PLÁSTICO
  • 4.       TAPAR (NO HERMETICAMENTE, HACERLO SUAVE CON LA TAPA DEL FRASCO O CON UNA GASA O UN TUL LIMPIO Y UNA GOMITA) Y DEJARLO 24 HS EN UN LUGAR TEMPLADO Y SIN LUZ DIRECTA DEL SOL. PASADO UN DÍA SE VUELVE A REVOLVER Y SE DEJA REPOSAR POR 12 A 24 HS MÁS. LUEGO DE ESE PLAZO ESTA LISTO.
  • 5       EXPRIMIR MEDIO LIMÓN DENTRO DEL LÍQUIDO. COLAR, CONSERVAR EN BOTELLA (PREFERENTEMENTE DE VIDRIO) Y RESCATAR LA BOLSITA CON LOS NÓDULOS PARA EMPEZAR NUEVAMENTE EL CICLO, EXACTAMENTE IGUAL.

TIPS A TENER EN CUENTA

  • ·     LOS NÓDULOS NO SE LAVAN. LA BOLSA SE VUELVE A COLOCAR EN EL FRASCO LIMPIO, TAL CUAL SALIÓ y GUARDAR EN HELADERA. EL RESTO (DESPERDICIOS DE LIMÓN Y DÁTILES) SE DESCARTA.
  • ·      PARA MANIPULAR EL KEFIR NO SE RECOMIENDA LA UTILIZACIÓN DE UTENSILIOS DE METAL (ALUMINIO, ACERO). ELEGIR SIEMPRE UTENSILIOS DE MADERA, PLÁSTICO O VIDRIO.
  • ·     ES MUY PROBABLE QUE EL PRODUCTO FINAL QUEDE FINAMENTE GASIFICADO, QUEDANDO APENAS CARBONATADO.
  • ·      EL KEFIR EN BOTELLA SE PUEDE CONSERVAR REFRIGERADO DE 3 A 4 SEMANAS.

Desde Equipo Nutricional te asesoramos para mejorar tu alimentación y tu calidad de vida, personalizando las recomendaciones según tus gustos, hábitos, composición corporal, deporte y/o actividades que realices.  Cualquier duda o consulta estamos a tu disposición.


Silvina Mayo
Lic. en Nutrición M.N 7450
Nutricionista de Staff de Equipo Nutricional
Nutricionista Clínica
Antropometrista
Videoconsultas




Lic. Carina Peretti
M.N. 2840
Directora
Nutricionista Clínica
Profesora en Nutrición y Deporte
Antropometrista
Sede: Belgrano





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 “Nutrición Adecuada a Vos”
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